¡Los orígenes del Microblading y el maquillaje semipermanente!

DE DÓNDE VIENEN ? QUIENES SON ? 

Si te interesa la belleza y pasas mucho tiempo en Internet, probablemente hayas oído hablar del microblading, esta tendencia de maquillaje semipermanente que lleva varios años en auge.

A diferencia de los tatuajes tradicionales, este proceso semipermanente utiliza pigmentos ingeniosamente insertados debajo de la primera capa de la dermis para brindar la ilusión duradera de cejas más llenas, oscuras y definidas. 

La popularidad del microblading se disparó prácticamente de la noche a la mañana: RealSelf, un sitio que alberga reseñas e investigaciones sobre diversos procedimientos cosméticos, afirma que la demanda de información sobre la técnica aumentó tanto que tuvieron que incluir el microblading en su propio tema en su sitio web.

Durante los siguientes nueve meses, este tema fue visto por más de medio millón de usuarios del sitio.

Por supuesto, el microblading es la tendencia del momento, pero de ninguna manera es el alfa y omega del maquillaje semipermanente.

De hecho, esta técnica ha existido en varias formas durante décadas.

Aunque es imposible decir con certeza cuánto tiempo existe el arte corporal (los tatuajes verificados más antiguos pertenecen a los restos momificados de Iceman Otzi, un hombre de hielo del Tirol europeo que murió alrededor del 3250 a. C.), pero la práctica es probablemente mucho más antigua). Su historia en todo el mundo es larga y variada. 

Antes de continuar, definamos qué entendemos por “Body Art”. Desde nuestro punto de vista, el arte corporal engloba todas las técnicas y dispositivos que utilizamos para embellecernos. 

Esto va desde pendientes a juego con nuestro outfit del día, hasta técnicas de maquillaje y/o tatuaje. 

Para las mujeres occidentales, comenzó en el siglo XIX, cuando el arte de verse bella se convirtió en una declaración de moda entre las personas de la alta sociedad. (Según se informa, la madre de Winston Churchill tenía un tatuaje de serpiente en la muñeca, y si eso no te hace querer saber más sobre la madre de Winston Churchill de inmediato, no creo que podamos estar de acuerdo :D)

Si bien los tatuajes en sí han tenido altibajos en popularidad, su uso con fines cosméticos faciales recién comenzó a despegar en Occidente en la década de 1980. 

Por esta época, los médicos comenzaron a buscar formas de ayudar a sus pacientes a lidiar con los síntomas de enfermedades como la alopecia, un tipo de pérdida de cabello en todo el cuerpo que ocurre cuando el sistema inmunológico decide atacar los folículos pilosos del propio cuerpo. 

Aunque las pelucas han podido sustituir el cabello natural, las personas con alopecia también pierden frecuentemente vello facial, incluidas las cejas. 

Mantenerse para dar la ilusión de tener unas cejas bien definidas y naturales requiere tiempo y habilidad en el día a día, especialmente cuando los pacientes padecen este tipo de enfermedades. 

Por eso tenía sentido que los pacientes comenzaran a recurrir a métodos más permanentes para dar la ilusión de cejas naturales.

Los tatuajes de estilo cosmético -que en esta época empezaron a adquirir nombres más profesionales como “maquillaje semipermanente” y “micropigmentación”- fueron una respuesta a una clara necesidad de belleza, y no sólo para las personas con alopecia. 

Para los pacientes que padecían afecciones como la artritis o la enfermedad de Parkinson, que podían dificultar la sujeción de los utensilios de maquillaje o la aplicación de productos con movimientos limpios y precisos, el maquillaje permanente ofrecía la opción de mantener su rutina de maquillaje sin frustraciones y sin perder tiempo. 

A partir de ahí, era natural que las mujeres que querían ahorrar tiempo en su rutina de maquillaje sucumbieran al atractivo del microblading y del maquillaje semipermanente en general.

Durante mucho tiempo, el maquillaje semipermanente siguió siendo un proceso similar a un tatuaje.

Sin embargo, hoy en día han surgido técnicas más avanzadas y adaptadas.

En Sobella Paris, Instituto de Belleza de Suresnes, certificamos que nuestras técnicas únicas permiten ofrecer a todos nuestros clientes un microblading adaptado a su rostro y con un efecto natural. Antes de proceder, nuestros expertos en belleza acuerdan un diagnóstico para poder ofrecerte la mejor forma para tus cejas, y darte los mejores consejos antes de cualquier práctica. 

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